La hipertensión se refiere a la presión arterial elevada de forma permanente, independientemente de la causa. Dado que no suele causar síntomas durante muchos años, hasta que un órgano vital resulta dañado, la hipertensión se conoce como «el asesino silencioso».
La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mm Hg). La presión normal es de 120/80 mm Hg, por lo tanto la hipertensión corresponde con una lectura de la presión superior a 129/80 mm Hg.
Es el principal factor de riesgo aislado, al cual se atribuye la mayor carga de muertes en Chile, particularmente de la enfermedad cardiovascular, cerebrovascular y renal. Se estima que 56,4% de las muertes por enfermedad isquémica cardíaca, 56,3% de la enfermedad cerebrovascular, 100% de la enfermedad hipertensiva del corazón, y 55.6% de la enfermedad renal crónica son atribuibles a la presión arterial (PA) sistólica elevada
Es importante que a partir de los 18 años de edad se lleve un control de la presión arterial al menos una vez al año sobre todo si se padece de obesidad, se lleva un estilo de vida sedentario, se es fumador, existe abuso del alcohol o exceso de sodio en la dieta ya que son factores que pueden desempeñar un papel activo en el desarrollo de la hipertensión sobre todo en aquellas personas con tendencia hereditaria al desarrollo de dicha enfermedad.
Fuentes:
1. Guía de Práctica Clínica – Problema de Salud AUGE N°21: Hipertensión Arterial Primaria o Esencial en personas de 15 años y más. DIPRECE.
2. Presión arterial alta (hipertensión). Mayo Clinic
3. Hipertensión arterial. MANUAL MSD